La moral designa el campo de lo permitido y lo prohibido y, por otra parte, el sentimiento de obligación del sujeto hacia ellas. El dominio de la moral abarca especialmente a aquellas acciones que implican el interés o el bien de personas diferentes del agente, requiriendo la existencia de normas y de un sujeto responsable de sus actos. Lo moral no constituye un fenómeno unitario, sino que se descompone en diferentes dimensiones, entre las cuales cabe destacar: i) los valores o normas morales, que permiten una clasificación explícita y racional de las cosas como moralmente aceptables o no; ii) las emociones morales, es decir emociones, tales como la culpa, vergüenza u orgullo, ligadas al interés o bienestar de otros individuos o de la sociedad como un todo.
Los estudios de psicología evolutiva y la descripción de trastornos de la conducta moral en pacientes con lesiones cerebrales explican el surgimiento de la neurociencia de la moral, cuyo objetivo es dilucidar los mecanismos neuronales y cognitivos de ésta. La neurociencia de la moral estudia las bases neurobiológicas de la moralidad mediante: i) estudios neuropsicológicos que abordan las alteraciones de las conductas morales en lesionados cerebrales y ii) estudios en neuroimagen funcional que muestran las regiones cerebrales que se activan durante la realización de tareas experimentales que involucran las capacidades morales.
Es de suma importancia explicar el por quë de nuestro comportamiento.